Pintura para metal: consejos para una buena aplicación

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Existen diversos usos que hacen necesaria la utilización de pintura para metal. Las barandillas y puertas exteriores, vallas, pérgolas, etc. sufren las inclemencias climatológicas y, con el paso del tiempo, empiezan a mostrar signos de corrosión u oxidación.

Pintar con frecuencia estos elementos exteriores es muy recomendable, puesto que es la mejor manera de lograr una protección y mantenimiento adeudados de los mismos, así como una evidente mejora estética, haciendo que luzcan siempre como nuevos.

Hay que tener en cuenta que pintar una superficie metálica, tanto si es en interior como en el exterior, es un proceso distinto a hacerlo sobre una pared o una madera, por ejemplo. Básicamente porque, como paso anterior a la aplicación de la pintura, es necesario preparar previamente la superficie metálica, lijándola para eliminar la pintura y aplicándole una capa de imprimación. Además, la tipología de pintura para metales puede también ser distinta de la que se utiliza para otras superficies.

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La preparación de las superficies de metal: un paso imprescindible

El factor más diferencial de pintar sobre metal respecto a otras superficies, como el yeso o la madera, es la preparación previa, la cual es diferente en función del tipo de metal y de si está o no oxidado.

A continuación, veremos cuál es la preparación correcta de las superficies metálicas en cada caso.

Metales oxidados

Cuando el metal está oxidado, es decir, en mal estado, algo muy común en elementos antiguos y/o que llevan ya un tiempo bajo los efectos de las inclemencias meteorológicas, lo primero que debemos hacer es retirar el óxido. Para ello tenemos dos opciones:

  • Con un lija: si los signos de oxidación o corrosión no son muy evidentes y se encuentran concentrados alrededor de las soldaduras, podemos quitar el óxido con facilidad usando una lija o un cepillo con alambres.
  • Aplicando un decapador: en superficies planas o si hay mucho óxido, lo más práctico es aplicar un decapante. Se deja actuar y, posteriormente, se retira con una espátula y se limpia la superficie con un disolvente.

Metales no oxidados

Si no detectamos óxido en los metales que queremos pintar seguramente es porque contienen grasa. En este caso debemos actuar de la siguiente forma:

  • Eliminar la grasa con un producto desengrasante con el fin de que, cuando pintemos, la pintura se adhiera correctamente.
  • Después de aplicar el desengrasante lo tenemos que limpiar concienzudamente con un trapo, para que no quede ningún resto.

La preparación del aluminio

El aluminio es un metal que no se oxida y tampoco tiene grasa, pero esto no significa que no precise de preparación. Para que la pintura se adhiera adecuadamente es necesario aplicarle una capa previa de imprimación, teniendo en cuenta lo siguiente:

  • Usar una imprimación especial para aluminio.
  • Dejar pasar el tiempo recomendado por el fabricante antes de aplicar la pintura.

Pintura sobre metal: trucos y recomendaciones

Aquí te dejamos algunos consejos útiles a la hora de pintar una superficie de metal:

  • Asegúrate de quitar todo el óxido antes de pintar, ya que de lo contrario volverá a aparecer en poco tiempo.
  • Si el elemento a pintar lleva una capa de pintura que está en buen estado y no se desprende al tacto podemos optar por aplicar una pintura antioxidante, sin necesidad de quitar previamente el óxido.
  • Para pinturas tipo forja o martelé podemos aplicar directamente sobre el óxido un convertidor que produce una capa de protección que actúa también como imprimación.
  • Además de, por supuesto, una buena pintura, utilizaremos brochas y rodillos que sean también de calidad. Nos ayudarán a conseguir los mejores resultados.


Pintura para metal de Blatem

En Pinturas Blatem disponemos de una amplia gama de pinturas para metal las cuales cuentan con el denominador común de ser aptas para cualquier superficie, resistentes, duraderas y de fácil aplicación. Al mismo tiempo, estos productos poseen unas características diferenciales que hay que tener en cuenta a la hora de elegir una u otra como, por ejemplo, el grado de satinado o el brillo.

Estas son nuestros 3 productos recomendados:

  • Blatem Oneon Antioxidante: esmalte brillante al agua formulado con tecnología avanzada para lograr excelentes prestaciones antioxidantes. Se puede aplicar directamente sobre el hierro sin necesidad de imprimación. También ofrece una muy buena cubrición, brochabilidad y secado.
  • Blatemlux: esmalte sintético de excelente calidad que destaca por su potente blancura y máxima resistencia. Es muy fácil de aplicar y se puede emplear en metales que se encuentren tanto en interior como en el exterior.
  • Blatemlac Satinado: esmalte laca de poliuretano indicado especialmente para acabados satinados de lujo. Ofrece una elevada blancura, dureza y resistencia a la abrasión. Además, está homologado según la norma UNE-EN 13501-1:07.

Además, estos 3 productos tienen una ventaja añadida y es que cumplen con la normativa de bajas emisiones de COV utilizados en el interior.

Fuente de informacion: https://www.blatem.com/

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